Se llaman Pin-ups porque eran dibujos que los soldados colgaban con chinchetas en la pared o en las taquillas. Aunque ya dibujantes como Alphonse Mucha pintaban a mujeres en actitudes sugerentes, no fue hasta los años 20 cuando se popularizaron los dibujos de modelos ligeras de ropa. La Gran guerra se había terminado, pero la juventud aún tenía miedo de morir de un día para otro, así que hubo una gran (para la época, tampoco os vayáis a pensar) liberación sexual. Si estallaba otra guerra, que les quitaran lo bailao...
Unos años antes, el ideal de jovencita inteligente, con profesión y además desvestida habría sido intolerable. Pero con el estallido de la II Guerra mundial, se juntó que las mujeres tenían que mantener el país y que los hombres las echaban de menos en el frente. Así que la sociedad hizo la vista gorda, y de repente era frecuente ver dibujos de mujeres en ropa interior en los morros de los aviones, en las habitaciones de los soldados, en revistas en el kiosko... ¡una locura!